El ser humano actúa motivado por sus necesidades, dependiendo de ellas desarrolla habilidades, estrategias y competencias que le permitan seguir pres
El ser humano actúa motivado por sus necesidades, dependiendo de ellas desarrolla habilidades, estrategias y competencias que le permitan seguir preservando la especie. Precisamente la crisis que se vive a nivel mundial a causa del coronavirus ha impulsado una serie de actividades desde la arquitectura para “la defensa de cada uno de los cuerpos”.
‘ANTI-CUERPOS – Equipar-nos para la cotidianidad´ es un workshop deslocalizado que busca construir equipamientos que protejan a la personas del coronavirus, y que han denominado anti-cuerpos, ya que constituirán una membrana protectora que será ubicada en la piel para evitar el contacto con las partículas portadoras.
Más de 100 arquitectos, urbanistas, diseñadores, sociólogos, artistas visuales y estudiantes de arquitectura se han inscrito al ‘Workshop deslocalizado Anti-cuerpos: equipar-nos para la cotidianidad’, una iniciativa liderada por arquitectos de diferentes lugares de Colombia y Venezuela.
“Un workshop deslocalizado es un encuentro para la socialización y producción de conocimiento, en el que participan actores de diferentes partes del mundo. De Colombia está el Colectivo COONVITE y Territorios Futuros de Medellín, Ruta 4 de Pereira, AGA estudio de Venezuela, Arquitectura para Aliens y el Departamento de Arquitectura y Diseño de la Universidad de la Costa”, señala María Verónica Machado, profesora de la Unicosta.
En este espacio, en el que la arquitectura nace desde la defensa de cada uno de los cuerpos, conjugando la precaución y precisión de la medicina preventiva con la desmesura del arte para provocar actos creativos productores de soluciones que contribuyan a la prevención del contagio de COVID-19, estarán participantes de más de 10 países del mundo, como Canadá, Estados Unidos, República Dominicana, Brasil, Argentina, entre otros.
“La acción colectiva es la puesta en práctica del workshop, es decir, la generación de propuestas que desde la arquitectura prefiguren algún tipo de protección. Es entonces que, a partir de una concepción de la arquitectura que atienda nuestras realidades, activada como práctica crítica hacia las nociones y modelos institucionalizados de la arquitectura, nos conduzcan a comprender que la protección del cuerpo contra el contagio del coronavirus es una cuestión que concierne a la arquitectura en forma de equipamiento”, explica Machado.
Señala que son unos equipamientos que están a otra escala, distinta a la de los hospitales, a la de los centros asistenciales de emergencia portátiles y de los elementos de desinfección humana.
“Las propuestas de equipamientos que buscamos aquí son más cercanos al cuerpo, por eso también corresponde denominarlos ‘equipamiento deslocalizado’, ya que las personas los portarán encima. La idea es que puedan ser generados a partir de lo que se tiene a la mano, que no implique un costo adicional, que estén dentro de los parámetros de higiene establecidos y que además estén en correspondencia con los sectores en los que buscamos incidir. Esos sectores que deben salir a trabajar diariamente aun estando en confinamiento”.
Esta acción colectiva en línea se llevará a cabo los días 16, 17, 23 y 24 de mayo, y contará con la participación del doctor Álvaro Ramírez, posdoctor en Epidemiología y Virología molecular de Dengue, VIH y Virus de Hepatitis del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC), y Diana Avendaño, trabajadora social egresada de la Universidad de Antioquia, magíster en Estudios Socioespaciales, investigadora en temas relacionados con la planeación territorial urbana y la autoconstrucción de vivienda, para hablar sobre los requerimientos técnicos de higiene y correspondencia social.
Así mismo, contará con la participación de Catalina Gómez Rueda, maestra en artes plásticas y visuales, para estimular la acción creativa que conduce a la generación de cada uno de estos equipamientos.
Puedes hacer parte de la acción colectiva registrándote aquí.
En estas cuatro sesiones programadas, que hacen de un taller de incidencia internacional, se contemplarán factores técnicos, dimensiones de la realidad implicada y su contextualización, la generación de propuestas, el discernimiento sobre la pertinencia de las propuestas y la entrega de las mismas.
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